Está claro que el clima que se respira en Boca es de paz y tranquilidad porque son todas buenas noticias las que últimamente está teniendo el plantel que conduce el Director Técnico interino, Claudio Úbeda, y que para el match que sostendrá con Argentinos Juniors dentro de tres días en La Bombonera desde las 18:30 repetiría el mismo esquema e idéntico once, pero Hugo Balassone hizo foco en el programa “Líbero” –que se emite por las tardes de lunes a viernes en el canal de televisión TyC Sports– en que dos jugadores podrían verse beneficiados con un cambio táctico.
Si bien el dibujo que utiliza el entrenador del club boquense es el 4-4-2 con dos centrodelanteros y dos volantes bien definidos por los costados, lo cierto es que estos dos futbolistas por afuera, que son Carlos Palacios y Exequiel Zeballos, a excepción del “Changuito” que con su desequilibrio y desparpajo es capaz de romper cualquier defensa abroquelada, por el lado del chileno, su talento no es aprovechado como es debido ya que no pisa el área con frecuencia.
La realidad indica que el trasandino colabora más en defensa que podría hacerlo en la zona ofensiva porque posee cualidades y virtudes que pocos poseen como el control del balón en sus pies y el regate y la velocidad con la que se desplaza en el campo de juego para desnivelar y dejar en ridículo a cualquier rival que se interponga en su camino.
Sin embargo, el ex Colo Colo realiza una doble tarea que es ayudar en la marca y despejar la pelota cuando está en propia área para alejar el peligro que conllevaría que el contrincante efectúe un ataque directo mediante centros o que un infortunio como puede ser un rebote desfavorable genere una situación manifiesta de gol en contra.
Se verá entonces si, en algún momento del desarrollo del partido con el “Bicho”, el “Sifón” modificará el sistema y pasará a un 4-3-3 más dinámico y menos centralizado para que el tridente de arriba procure concretar las oportunidades que disponga a su favor.
