Nadie en Boca duda de querer contar con los servicios de Ander Herrera en el plantel de cara a 2026. Por liderazgo, jerarquía y experiencia, el español es uno de los referentes y voces de mando principales del vestuario que pretende planificar el Presidente, Juan Román Riquelme. Sin embargo, la realidad también indica que las lesiones lo tuvieron a maltraer, lo dejaron más afuera que adentro de la cancha durante todo el año y, por esa razón, la dirigencia tomó la postura de ofrecerle un nuevo contrato con ajustes según informó la web de TyC Sports.
Como el jugador de 36 años no firmó la renovación automática por una temporada que estaba contemplada para octubre, el plazo venció y el panorama cambió con relación a su continuidad. Esto implica que, si decide continuar en actividad y defendiendo la camiseta azul y amarilla, deberá aceptar las nuevas condiciones que el club boquensele propondrá en su vínculo.
Hay dos variables que se barajan en el “Xeneize” con respecto al pacto firmado del vasco para el próximo año: que sea por productividad, es decir, por partidos jugados y objetivos cumplidos en el campo de juego;o que acepte una reducción salarialen el mismo a diferencia de lo que percibía antes.
La postura de la institución tiene que ver con la frágil condición física que mostró el mediocampista desde su arribo, justamente la misma razón que al propio futbolista lo lleva a plantearse la chance de ponerle un punto final a su carrera.
Todos los integrantes del conjunto azul y oro anhelan que el volante permanezca ligado a la entidad para una campaña en la que la Copa Libertadores volverá a estar en el centro de la escena, pero deberá aceptar esos términos contractuales. Ahora, la palabra final la tiene el protagonista, que se planteó pensar qué será lo mejor para su futuro tras sufrir cinco lesiones musculares en 2025 y solo participar de 17 de los 44 encuentros del elenco (38% de presencias).
