La polémica entre Sofía Gonet y Homero Pettinato sigue generando repercusiones y abrió un debate que va más allá del conflicto personal. Marcela Tauro fue una de las voces más críticas al referirse al impacto que este tipo de figuras tiene en la opinión pública, especialmente entre los más jóvenes, y no dudó en apuntar contra los medios que amplifican estos perfiles.
La opinión de Marcela Tauro sobre Sofía Gonet
El eje de la discusión se encendió cuando en el programa se mencionó que Wanda Nara planea pasar las fiestas en Punta del Este junto a Evangelina Anderson y la propia Gonet. Fue entonces cuando la conductora de Infama expresó su malestar sin rodeos. “La Reini es muy tóxica como Wanda. Wanda también es tóxica. Perdónenme, pero para mí esta chica está… no la justifico”, lanzó, marcando una postura contundente.
Lejos de limitarse al caso puntual, la conductora amplió su análisis y puso el foco en el rol de la televisión y las redes sociales en la construcción de estos personajes. “La locura que vendemos, chicos… Me parece gravísimo. Pero la culpa también es nuestra, de los medios. Porque Telefe tiene contratadas a estas loquitas, estas chiquitas que enloquecen”, disparó, visiblemente molesta por la naturalización de ciertas conductas.
Tauro también cuestionó el nivel de violencia verbal que circula en redes y que luego se reproduce en la pantalla chica. “Le decís a un tipo ‘golpeador’, ‘te voy a romper el cráneo’, ‘drogadicto’, y del otro lado responden con ‘gato cascoteado’. Eso es peligrosísimo”, advirtió, en referencia a los mensajes que se habrían intercambiado Gonet y Pettinato.
En la misma línea, Karina Iavícoli sumó una mirada preocupante sobre el efecto aspiracional que generan estas figuras. “A las chicas jóvenes les muestran una vida que no existe: no trabajar, hacer quilombo, que te paguen todo. La vida no es así, y eso es peligroso”, sostuvo.
Para cerrar, Tauro dejó una reflexión que sintetizó su postura: “Las pibas hoy no quieren estudiar ni trabajar porque parece más fácil irse de modelo a Dubái. Es lo que estamos viviendo, lamentablemente”. Mientras el escándalo entre Gonet y Pettinato parece lejos de apagarse, el debate sobre los límites, la exposición y la responsabilidad mediática quedó definitivamente instalado.
