Gustavo Sylvestre, periodista y conductor de TV, manifestó que la renuncia de Máximo Kirchner como presidente de la banca de diputados del oficialismo generó un temblor dentro del Frente de Todos y agitó las internas. Sin embargo, no le pareció mal, ya que consideraba al hijo de Néstor Kirchner como un dirigente con «muy poca comunicación» y que no se lo veía en una «posición cómoda» defendiendo al Gobierno.
Vamos a hablar mucho hoy de lo que significa esta renuncia de máximo a la presidencia del Frente de Todos, con un nuevo problema para el partido y el oficialismo, que no tiene paz con las divisiones internas. Muchas veces en la Argentina cuando la economía se empieza a arreglar y tenés buenos números y crecimiento, lo político desbarajusta todo», sentenció Sylvestre en una editorial para Radio 10.
«Algunos me preguntan, ¿Cuál era la importancia del cargo que tenía Máximo? Era el presidente de la bancada del oficialismo en la Cámara de Diputados y hay que decirlo, una de las críticas que le hacía a Máximo era la poca comunicación y que no se lo veía en una posición cómoda defendiendo al Gobierno, porque el forma parte de un frente en donde La Campora tiene puestos muy importantes dentro del oficialismo», explicó el periodista que también trabaja en C5N.
«Esta decisión ha provocado esta nueva remezón para el Frente de Todos y Habrá que ver ,lo que sucede hoy. Anoche, hubo una reunión del presidente, Alberto Fernández, con Sergio Massa y otros integrantes del Gobierno. Por lo que percibí, había mucha molestia en la mayoría con esta decisión de Máximo», remarcó Sylvestre.
«Creo que también estaban arreglando un principio de acuerdo, pero con un desahogo, con ese caballo de Troya que había dejado el macrismo que es el FMI y anoche el presidente lo dijo, no hay nada que celebrar, uno no está contento de arreglar con el fondo», señaló el exconductor de Todo Noticias y agregó: «Se olvidan parte de la historia, también ayer Máximo cuando hacía referencia que Néstor se había quitado al Fondo se olvida que, en el 2003, su padre lo había hecho para ganar tiempo».