Luego de verse involucrado en una pelea callejera, en donde se lo habría visto portando un arma de fuego, Elián Valenzuela se encuentra nuevamente en el ojo de la polémica. Este mediodía el cantante más conocido como L-Gante, se presentó a ante la fiscalía de General Rodríguez y se negó a declarar pero su madre fue la encargada de dialogar directamente con el Pollo Álvarez.
Todo comenzó cuando Carlos Monti explotó de furia al ver como el movilero del programa era desplazado del lugar. «Este muchacho de lentes que te dice que no podés estar ahí quién es? ¿De dónde salió? No es de la fiscalía, no es de la Justicia. ¿Quién es? ¿Quién le dio autorización?», expresó el periodista por lo que rápidamente el notero explicó «son los amigos de L-Gante, gene que lo acompaña, son como 20 o 30 personas».
Ese fue exactamente el momento en el que Sandra Borghi exclamó al aire que se encontraba en comunicación telefónica con Claudia Valenzuela, madre del cantante. «Elián está tranquilo. No me enfoquen, porque se van a dar cuenta que estoy hablando. Yo lo esperé acá en la fiscalía para que salga de declarar. Él tiene ganas de contar su verdad», expresó.
«¿Estos muchachos que están alrededor quiénes son?», inquirió la conductora, que hoy se despidió del ciclo para afrontar un nuevo rol como conductora del noticiero que emite El Trece al mediodía. «Son los amigos de Elián que están siempre con nosotros. Son los de la banda», expresó Claudia a través de la comunicación telefónica.
Minutos más tarde, el cantante salió de la fiscalía y se detuvo a hablar con los periodistas que lo esperaban. «Me negué a declarar. No sé de qué arma están hablando, a mi mamá le encontraron un arma de juguete», aseguró el creador y cantante de «Cumbia 420», acompañado de su abogado Alejandro Cipolla. Además su pareja Tamara Báez, con quien tuvo a la pequeña beba Jamaica, también utilizó su derecho y se negó a hablar frente al fiscal.