La vuelta a clases está cada vez más cerca, ya que, en Argentina se reanudan el próximo 2 de marzo. Sin embargo, en algunos distritos como la ciudad de Buenos Aires empezaron hoy. En ese marco, un estudio de la asociación Argentina en Datos determinó que de las 24 jurisdicciones educativas que hay en el país, únicamente CABA y Neuquén cuentan con un esquema de 190 días de clases en el nivel primario mientras que Chaco, San Luis y Tierra del Fuego no cumplen con los 180 días de clases, establecidos en la ley 25.864.
Frente a ese panorama, Alietto Guadagni, integrante de la Academia Nacional de Educación, dialogó esta mañana con Eduardo Feinmann, que conduce el ciclo Y Alguien tiene que decirlo en Radio Mitre y explicó los problemas educativos que atraviesa nuestro país. En ese sentido precisó que «la prueba PISA de 2018 midió el conocimiento de los adolescentes de 15 años de edad de 77 países y la Argentina está en el lugar 71».
En consecuencia, afirmó que «el nivel de ignorancia en las ciencias básicas especialmente matemática es muy grande en Argentina» y advirtió que «esto compromete el futuro». Sin dudarlo, aseguró que «el futuro no es Vaca Muerta, el futuro es el capital humano» y remarcó que «el capital humano lo construye el sistema educativo».
Al igual que el informe de Argentina en Datos, el entrevistado hizo hincapié en que «nuestro sistema educativo no cumple las leyes fundamentales, los 180 días de clases, la jornada extendida y la ley de educación secundaria obligatoria» y además, aseveró que «la situación educativa se ha agravado con la pandemia» porque «la pandemia ha introducido una desigualdad tremenda entre los pibes ricos y los pibes pobres».
«Los pibes ricos pudieron seguir teniendo clase a través de los sistemas informáticos», indicó al tiempo que recalcó que «los pibes pobres que viven hacinados en un conventillo o una villa no pueden acceder a las clases». En ese marco, un informe de Unicef precisó que con la llegada del coronavirus, un millón de chicos abandonaron el sistema educativo en Argentina. Para concluir, Guadagni cuestionó que «no hemos copiado a tres países muy importantes que solucionaron el problema, Cuba, México y Perú, que «usaron la televisión pública para dar clases».
En junio del año pasado, Nicolás Trotta, quien era ministro de Educación en ese entonces, detalló que «casi el 10% de los estudiantes tuvo bajo o nulo vínculo con la escuela» durante 2020, lo que es igual a «casi un millón de alumnos» en Argentina. En consecuencia, en una entrevista a Radio Mitre, el exfuncionario reconoció que la pandemia «iluminó» la «desigualdad» que perjudica desde hace años al sistema educativo en nuestro país.
El Gobierno quiere construir más escuelas, pero recortó el Presupuesto en Educación
La semana pasada, tal como informó El Intransigente, el presidente, Alberto Fernández comunicó la construcción de 100 escuelas técnicas en todo el país, a fin de que «la Argentina vuelva a educarse» y así pueda afrontar la pobreza y la desigualdad existentes. Si bien el mandatario aseguró que ese era «el principal objetivo después de la pandemia», en 2021 ajustó el presupuesto al Ministerio de Educación y pensaba seguir el mismo camino este año.
Previo a que comience el ciclo lectivo el año pasado, el Consejo Interuniversitario Nacional (CIN), que agrupa a 60 casas de estudios superiores públicos, afirmó que desde Hacienda habían achicado la distribución de los fondos para las facultades a $330.000 millones y aseveraron que ellos precisaban $408.000 millones para poder costear los gastos de sueldos, servicios y mantenimiento entre otros.
Además, el Presupuesto 2022, que no fue aprobado en la Cámara de Diputados, también establecía un recorte en educación de alrededor de $225.000 millones. No obstante, esa plata era para la construcción de nuevos colegios y los programas de apoyo para alumnos.