Con dolor y conmoción el mundo del espectáculo despidió a Gerardo Rozín. Según la información que trascendió, el animador de Telefe padecía una afección cerebral que deterioró su salud en el transcurso de un año. De hecho, el presentador estaba consciente de la gravedad del asunto por lo que tomó una determinación importante antes de morir.
En «La tarde del Nueve» el conductor Tomás Dente reveló detalles de los últimos días de vida de su colega: «Él decide fallecer en su casa, en su habitación en su cama rodeado de afectos, de sus objetos, de sus afectos, de sus hijos, con sus mujeres. De hecho él decide que lo seden que lo duerman tres días antes cuando el sentía que la muerte prácticamente la tenía cara a cara».
«Pasaron sus amigos más cercanos de este medio, le pusieron la música que le gustaba. Fue en un contexto ameno a pesar de que la tristeza estuvo ahí latente», agregó el comunicador más tarde. En ese marco, sacó otra temática a colación: «Yo pensaba mucho en el concepto de la muerte digna, en el caso de Gerardo fue así».
Una especialista en la temática presente en el estudio de televisión reafirmó el concepto que presentó Dente en vivo: «Me parece un concepto importantísimo el de la muerte digna, uno puede decidir cómo morir, como llegar al final, que es tal vez el cierre. Mientras uno tiene conciencia puede elegir».
«A veces poder aceptar ‘hasta acá llego’ también es una valentía impresionante porque veníamos con esto de luchar hasta el final que nunca terminamos ganamos», señaló la profesional para cerrar. Aunque los allegados a Gerardo Rozín sabían de su situación, decidieron preservar los detalles hasta el final para darle paz y tranquilidad a los familiares del hombre.
