Más allá de la agenda partidaria, Alfredo Leuco suele referirse a efemérides relevantes en sus editoriales. De hecho, en uno de sus programas más recientes por Radio Mitre el comunicador lanzó una reflexión por el Día del Trabajador, que celebrará el próximo domingo y aprovechó para cuestionar a algunas personas en el poder.
«Este domingo es el día del trabajador y quiero hablar de los trabajadores. No de los que no trabajaron nunca como Máximo Kirchner que va a participar de un acto de la CGT. Tampoco de los que hacen actos jurásicos con colectivos e infraestructura que pagamos todos los argentinos», arrancó el comunicador contundente.
Asimismo señaló: «Son días muy tristes para todos los que se ganan la vida con el sudor de su frente. La inflación, el desempleo, la pobreza son enfermedades que envenenan la vida de todos. No hay espacio para festejar. Al revés de las mentiras insólitas que dice el presidente Alberto Fernández, la pandemia y la pésima gestión quebraron empresas y bajaron la cantidad de puestos de trabajo. Ni hablar de los que viven de changas. Esos laburantes sufrieron como nunca».
«Estamos ante una verdadera tragedia social y todavía no sabemos hasta donde pueden llegar sus consecuencias. Por eso le digo que en este día del trabajador no habrá mucho que celebrar. Todo lo contrario. Habrá mucho que lamentar. Me gustaría recordarles que el trabajo dignifica y significa. El trabajo y el amor son los dos motores que mueven el mundo. Nuestra vida y la de nuestra familia gira alrededor del trabajo. Es lo que nos permite crecer y multiplicarnos. Multiplicar los panes y los peces. Desarrollar nuestras capacidades», agregó después.
A modo de cierre, Leuco postuló: «Estamos hartos de ver trabajadores pobres y gremialistas millonarios y atornillados a sus cargos como si fueran una monarquía. No digo que todos sean patoteros y ladrones. Pero existe una poderosa mafia sindical que defiende sus privilegios y condena a los trabajadores. Tenemos que poner toda nuestra energía en combatir al virus criminal pero también en construir una sociedad productiva, con incentivos al progreso y el mérito. Y que todo el peso de la ley caiga sobre los mafiosos y los corruptos».