Ernesto Tenembaum, periodista y conductor de radio, manifestó que el FMI está pidiendo que los argentinos consuman menos para que no haya tanta demanda de dólares que termine perjudicando las reservas del Banco Central. Por otro lado, Tenembaum dijo el problema de la energía sigue siendo algo central, porque no hay gasoil y no hay divisas para importar a bajo costo.
«Esta semana aparece en un lugar preponderante todos los problemas económicos de la Argentina, mas allá de cómo esté el empleo y la producción, lo que recorre la economía argentina hace mucho tiempo es una sensación de bomba de tiempo. Hay una desconfianza de que en algún momento la deuda en pesos se deje de pagar porque ya hay inversores que manifiestan su interés de salirse y quieren irse al dólar», expresó Tenembaum en radio Con Vos.
«Está la energía como tema central. No hay gasoil, porque no tenemos dólares para importar barato o porque no nos avivamos rápidamente de producir gasoil en Argentina. Está el tema del FMI que nos dijo: si esta economía quieren que ande bien tienen que consumir menos, porque consumir te demanda dólares y el gasto de dólares te genera menos reserva y crisis de mayores proporciones», señaló el exconductor de Palabras más, palabras menos.
«Carlos Melconian (economista y exfuncionario de Mauricio Macri) se encontró con Cristina Kirchner. Tenés dos personajes que cada vez que se juntan los opuestos a uno le llama la atención. Melconian se hizo una fiesta con esto mostrando que él habla con todos los presidentes», contó el exeditor de Página 12 mientras analizaba temas de la actualidad.
«En la agenda aparece María Migliore, es la funcionaria de Horacio Rodríguez Larreta que se ocupa de lo social. Es una mujer de origen católico que está metida en las villas. Debe tener entre 35 y 37 años. Yo la vi en la villa Rodrigo Bueno pararse en una silla y orientar a 50 tipos en la distribución de viviendas. Ella dijo que el Estado tiene que recuperar la economía popular y defendió los planes sociales. Un macrista diciendo que hay que bancar los movimientos sociales es rarísimo», concluyó Tenembaum.
