Durante la primera parte, Marcos Rojo fue protagonista en la jugada más importante. El zaguero central de Boca cometió penal a los 39 minutos del partido frente a Corinthians, por los octavos de final de la Copa Libertadores de América. Pero apareció Agustín Rossi, el arquero del conjunto azul y oro, para tapar el remate y salvar a su compañero. Por eso Marcos después devolvió las gentilezas.
Es que, ni bien comenzó el segundo tiempo, el «Timao» avanzó con seguridad y estuvo a nada de abrir el marcador. Willian armó una buena jugada individual que terminó en un pase atrás para Giuliano Victor de Paula, quien remató con un Rossi que estaba siguiendo a la pelota y quedó descolocado. Por fortuna para los dirigidos por Sebastián Battaglia, Rojo interceptó ese disparo y salvó a Boca.
Las apariciones de Rojo en el partido fueron esporádicas y se intercambiaron entre positivas y negativas. Si bien cometió el penal de la primera parte, levantó su imagen con esa intervención ni bien empezó el complemento. La defensa de Boca sufrió un poco en los avances del Timao, que llegó por ambas bandas. Por ahora, de todas maneras, es empate sin goles en el Arena Corinthians de San Pablo.