Uno de los fenómenos más preocupantes para los argentinos es la constante suba de la inflación. Este tema también perjudica a la economía general del país que se encarga de manejar Sergio Massa, quien entabló conversaciones con el Fondo Monetario Internacional (FMI) luego de haber sido aprobada la segunda revisión del acuerdo.
En este marco, desde la entidad internacional se mostraron preocupados por el constante aumento del IPC y el dirigente prometió reducirlo. Tal es así que anticipó que los números de octubre serán más bajos que los de septiembre, cuyas proyecciones se ubican cerca del 6,9% según las consultoras privadas puesto que los datos del INDEC se conocerán el viernes 14 del corriente mes.
Uno de los factores que altera la inflación en Argentina es el déficit fiscal. El mismo está pactado dentro de los objetivos con el FMI y Sergio Massa afirmó que «las metas de reservas y de asistencia al Tesoro se cumplieron también en el tercer trimestre y sólo falta discutir con el FMI la meta fiscal» y que de esta manera reducirán al 2,5% del PBI el déficit.
Un dato alentador para el titular del Palacio de Hacienda es que en el Fondo proyectan un crecimiento del 4% para el país aunque los datos de la inflación son malos. Estiman un 95% para este año y para el 2023 un 60% que está en línea con el Presupuesto 2023 que presentó el propio dirigente. Claro está que esos números no son para nada buenos y la idea es reducirlos de urgencia.
Sergio Massa apunta a la tercera revisión
Luego de haber cumplido con la segunda revisión, Massa aspira a repetir este logro al final del tercer trimestre. De ocurrir eso, el FMI hará un desembolso de US$ 5.800 millones para pagar vencimientos futuros según Télam. Cumplir con este acuerdo es fundamental para el país y seguir las recomendaciones del organismo internacional también para no agrandar la deuda o entrar en default.