Una hija de Hugo Moyano quedó más que comprometida ante la Justicia por una causa por presunto lavado de dinero. Se trata de Karina Moyano, sobre quien el Juzgado Federal Nº 2 ordenó embargar una de sus propiedades valuada en 153 millones de pesos. A la hija del líder del Sindicato de Camioneros la acusan de presunto lavado tras no devolver 600.000 pesos y 434.000 dólares.
La propiedad en cuestión es una ubicada en la calle Inclán al 3.000, en la Ciudad de Buenos Aires, y el caso por el cual se la investiga se inició ahí. Pues allí el entonces juez Federico Villena allanó en el marco de una causa por drogas unos $ 600 mil pesos y US$ 436.670. Desde entonces, se intimó a Karina Moyano a justificar el origen del dinero, aunque luego el juez Juan Pablo Augé anuló la medida, según NA.
Ocurrió que durante la feria judicial de enero último, la causa, delegada en la Procuraduría de Narcocriminalidad de Diego Iglesias, se ordenó la devolución del dinero a Moyano por parte de Villena. Finalmente, cuando el caso llegó a la Cámara Federal de La Plata se ordenó que la hija del sindicalista entregue la suma hasta agotar la investigación pero ella dijo que lo había gastado.
Ahora, el Juzgado 2 dispuso el embargo cautelar de la propiedad y para eso dispuso su tasación la cual se estableció en $ 153 millones. La justificación del juzgado es que podría “ser objeto de decomiso” ya que por el momento Moyano no ha justificado de dónde proviene esa suma y por eso la sospecha de lavado de dinero. Previo a resolver el embargo, el juez comprobó que la propiedad es titularidad de ella y que fue allí donde se secuestró el dinero de una investigación que aún continúa.
¿Por qué Karina Moyano no tiene el dinero?
El juez Luis Armella, temporalmente a cargo del Juzgado Nº 2, se lo ordenó a Karina Moyano, pero ésta presentó un escrito donde dijo que era imposible: los $ 600.000 y los US$ 434.000 ya no los tiene. La hija del líder de Camioneros informó a través de un escrito que ese dinero lo destinó a inmuebles en Capital Federal y provincia de Buenos Aires, mientras que otra parte la devolvió puesto que había recibido en préstamo.
Parte de ese monto, según dijo, es aquel que le devolvió en orden a US$ 80.000 a Daniel Llermanos, histórico abogado de la familia Moyano. Por eso, Karina Moyano dijo que es imposible devolver la plata tanto “material como jurídicamente”. Ocurre que no sólo no lo tiene, sino que –explicó–, en su momento, el juez Villena se lo devolvió y no pesaba sobre el dinero algún impedimento.
Ahora, la Justicia reclama el dinero para ponerlo bajo tutela judicial hasta tanto se aclare el origen del mismos. Ante la respuesta que dio la hija de Moyano, el juez Armella ordenó tasar una propiedad del clan Moyano, ubicada en Inclán al 3.700, en el corazón del barrio porteño de Boedo, a pocas cuadras de la Autopista 25 de Mayo, y puede que él mismo sea el reemplazante.