Sin lugar a dudas, Darío Barassi está cerrando uno de sus mejores años, tanto en lo profesional, con el éxito de ‘100 Argentinos Dicen‘, como en lo personal. Es que, luego de casarse con Luli Gómez Centurión, formaron una familia, con la llegada de Emilia, hace 3 años, y de Inés, este año. Sin embargo, durante los últimos días, causó mucha preocupación por su salud, y decidió compartir detalles de lo que está viviendo.
Luego de un año de mucho trabajo, Darío Barassi terminó de grabar ‘100 Argentinos Dicen’, y viajó a San Juan, a pasar unos días en familia. Sin embargo, luego de varios días allí, debieron regresar, junto a su mujer y sus dos hijas. Al llegar a Buenos Aires, estuvo desaparecido de las redes sociales, hasta que finalmente decidió compartir que estaba enfermo.
«Como era de esperarse, después de 11 días en San Juan viviendo intensamente, caí, estoy muerto… Panza explotada, fiebre. Debe ser algún virus del ort…, que paj… Es la peor semana del mundo para estar mal. Tanto laburo, tanto asado, tanto evento… Estómago, resistí. Ay Dios, me siento para el ort…», expresó Darío Barassi. Posteriormente, compartió otra historia, donde expresaba: «Me quiero matar, pásenme remedios caseros, gualichos o algo que me estabilice, que me ponga en eje».
Luego, compartió: «Mi mujer fue con la más chiquita a buscar a la más grande. Me quedé solo, entonces no tengo con quién quejarme, por eso agarré el teléfono. No soy un buen enfermo, soy de esos que me quejo, balbuceo, necesito amor todo el tiempo… Eso soy». Minutos más tarde, compartió una foto de su cama, con su hija Emilia al lado, y comentó: «Mi compañera de internación».
Al ver la preocupación que generó su salud, horas más tarde decidió compartir, en una historia, que «pensé que era covid, pero no», y se veía un test negativo. Sin embargo, esta mañana decidió compartir un posteo, donde comentaba: «Sigo con esta internación domiciliaria, sintiéndome para el orto. Instagram es todo gente ya de vacaciones, comidas de fin de año, gente laburando en curros de los que me tuve que bajar… En fin, Diosito ya llévame».
