Este miércoles, Diego Martínez tenía pensado rescindir su contrato con Huracán y luego reunirse con el Consejo de Fútbol y Juan Román Riquelme para sellar su llegada a Boca. Sin embargo, el entrenador aún no pudo firmar formalmente la desvinculación del Globo y todavía no tiene permitido estampar la rúbrica en Brandsen 805.
Si bien su inesperada decisión cayó mal en la institución de Parque Patricios de cara la pretemporada y el proyecto deportivo del 2024, el presidente del Quemero, David Garzón, quiere acordar la salida del técnico de 45 años para no dilatar más el tema que tiene en vilo al mundo Boca y poder incorporar a su reemplazante, Facundo Sava.
No obstante, antes el mandatario reclama la devolución de un dinero que le pagaron al representante del estratega por adelantado cuando recién llegó al club que aún no fue depositado y los seis meses de contrato restante por su salida anticipada. En este sentido, aparentemente hoy las partes llegaron a un principio de entendimiento, acordado el monto y el plan de pago, para la desvinculación.
Boca espera por Diego Martínez
«Estamos cerca de rescindir», aseguró Gustavo Mendelovich, vice del Globo. Una vez puesta la última firma, todo parece indicar que Martínez se juntará con los integrantes del Consejo del Xeneize para negociar su vínculo con el club de la Ribera (el cual sería hasta diciembre de 2024 y con la posibilidad de renovarlo por una temporada más).
La intención del nuevo mandatario del club de la Ribera, es que se cierre su llegada como nuevo entrenador antes del fin de semana, para que pueda ser presentado en sociedad en los próximos días en la sala de La Bombonera y dirija su primera práctica el martes 26 de diciembre en el predio de Ezeiza, en lo que será la vuelta al trabajo del plantel profesional.
