(R. Federico Mena-Martínez Castro).- Afortunadamente para nuestro país las extrañas circunstancias que devienen en el diario acontecer el ingeniero Franco-italiano Carlos Enrique Pellegrini que fuera contratado para proyectar la construcción de un puerto debido a que las aguas del río cuando había bajantes no llegaban hasta la misma orilla lo cual hacía que las mercaderías que venían en los barcos no pudieran descargarse los cual se realizaba mediante carros tirado por caballos que se adentraban en el río de la Plata. Esto se extendía a los pasajeros que debían mojar sus vestiduras
El ingeniero Pellegrini venía con la recomendación de Juan Larrea para los cual venía munido de una carta para tal fin dirigida a Bernardino Rivadavia con la mala noticia de que en esos momentos se desarrollaba la guerra con el Brasil.
El doctor Pellegrini conocido como “el Gringo” era nieto de un inglés cuáquero Santiago Evans que arribó a estos lares en el año 1822 que contribuyó a alistar el primer barco a vapor.
Fue su madre doña María Evans, hija de aquel inglés cuáquero. Carlos Pellegrini fue un hombre sólida cultura y de gran capacidad como estadista debido a su exitosa gestión durante la crisis política de 1880 además de otras por lo cual fue apodado “piloto de tormentas”.
Su primer maestro fue su padre cuando contaba cinco años de edad para luego ingresar en la academia que dirigía su tía doña Ana Evans hermana de su madre. Debido a sus habilidades políticas fue apodado “piloto de tormentas”
Conformó su hogar con Carolina Lagos de 19 años hermana de uno de sus mejores amigos con la cual tuvo una larga y provechosa convivencia. Fue Ministro de Guerra y Marina del presidente Avellaneda y contribuyó a sofocar la rebelión del gobernador de la provincia de Buenos Aires Carlos Tejedor como también a la solución del problema que se había suscitado referente a la capital de la república.
Corría el año 1886 cuando integrara la fórmula presidencial de Miguel Juárez Celman. Producida la renuncia de éste como consecuencia de la sublevación de la Unión Cívica en 1890 tuvo que hacerse cargo de la presidencia en tremendos momentos de crisis financiera. Por esta época fundó el Banco de la Nación Argentina se gran importancia para el país.
Fue un eximio orador y legislador experimentado distinguiéndose también como diputado y senador. Estas pesadas tareas que desempeñara con proverbial dedicación no le impidieron ser el fundador del Jockey Club lo que le permitió actuar con gran ascendencia en la alta sociedad porteña.
Por sus altas cualidades intelectuales y la fuerza y amor a la patria merece ser recordado con fuerza hoy 17 de julio aniversario de su fallecimiento luego de luchar con la adversidad de una cruel enfermedad.
