Papu Gómez fue durante años un jugador importante en la Selección Argentina, campeón de la Copa América y del Mundial de Qatar 2022. Y además un personaje popular, muy seguido en redes sociales. Pero en poco tiempo su vida pública dio un giro: dejó de estar en la Selección Argentina y lleva más de un año sin competir por una sanción por dopaje. Ahora, pasado el tiempo, Papu contó su vedad.
Papu recordó el inicio de su sanción, que según argumenta, se dio por consumir jarabe para la tos de su hijo menor. «Generalmente, yo me tomo una pastilla después de todos los partidos porque me cuesta mucho dormir. Me agarra un ataque de tos a mitad de la noche y le pido a mi mujer que me dé un jarabe para la tos. Y estaba el del nene más chico, de Milo. Me da una tacita chiquitita de jarabe para la tos”, contó el jugador en charla con Juan Pablo Varsky para Clank.
“Al otro día me voy a entrenar y había doping sorpresa. El doctor siempre pregunta si tomaste algo que ellos tenían que declarar. Yo me olvidé que había tomado el jarabe. Pasa el tiempo y me llega por email, dos días antes de la final, que había dado positivo. Fue un baldazo de agua fría. En la final de un Mundial, que te llegue una noticia así es horrible. Esos dos días estuve muy mal, estuve con fiebre. No sé si fue por la noticia o qué. Mientras festejaba estaba con la cabeza puesta en qué iba a pasar”, recordó el Papu Gómez.
El jugador fue campeón del mundo sabiendo el caso de dopaje y así lo contó a sus compañeros de la Selección Argentina. “Les conté en el hotel. Yo no le quise decir a nadie porque no quería que la gente esté en otro lado que no fuera con la cabeza en la final del Mundo. No quería ser egoísta de mi parte, de ir a contarles algo feo a chicos que estaban por jugar una final del mundo. Me lo guardé para después de la final del mundo. Cuando les conté me dijeron que me vieron bajoneado”.
Después de los festejos, comenzó el calvario para Papu, ya que la sanción se conoció y se fue extendiendo, hasta llegar a los dos años sin jugar. “Todo estaba encaminado a que iba a ser una sanción de seis meses. Pero al final todo se empezó a alargar, todas cosas burocráticas. No logramos entender qué hay detrás, por qué no reducen la sanción. Está claro que no les importa la persona, el que está sufriendo estoy yo. Ellos están tranquilos en su oficina. No sé qué argumentos tienen para que ni siquiera me den una respuesta”, se quejó Gómez.
En el medio, Papu dejó de ser parte de la Selección Argentina, pero no por el dopaje, sino por un distanciamiento nunca explicitado con sus compañeros. “No me gustaría retirarme así, me gustaría retirarme adentro de una cancha. Prefiero que se retire el Papu y que vuelva Alejandro. Quiero volver a empezar. Un año o dos años, lo que sea. Capaz juego tres partidos y me retiro, pero quiero llegar hasta ese punto”, dijo Gómez.
“Estoy trabajando en aceptar que el personaje del ‘Papu Gómez’ está llegando a su fin, está dejando de existir y que ahora soy una persona común y corriente, un padre de familia. Estoy trabajando el ego, de apagarlo un poco y tratar de subsistir con ‘Alejandro'», agregó Papu, que fue contundente. «Pasé de ser campeón del mundo, a que hoy no me llame nadie, desaparecer del medio o no jugar más. Hay que saber convivir con eso. Ni cuando estás allá arriba sos el mejor, ni ahora sos el peor. Solo que hay que priorizar otras cosas…”.
