Siempre dispuesto a dar un mensaje cargado de sentimientos. De esta manera es como se muestra nada más y nada menos que Aníbal Pachano, uno de los artistas más queridos, exitosos y talentosos del mundo del espectáculo de nuestro país, quien fue noticia a raíz de una nota que brindó en las últimas horas.
Esto sucedió en el ciclo de entrevistas denominado Desde Adentro, donde el padre de Sofía Pachano se manifestó sobre las enfermedades a las que les ha tenido que hacer frente. «Yo hablo mucho de la resiliencia, que no tiene que ver solamente con la enfermedad. Tiene que ver con la vida en tantos cambios, tantas mudanzas», comenzó diciendo.
«Una señora maleducada contó algo privado, que era mi HIV, lo hizo público sin pedir autorización. Una irrespetuosa absoluta. Yo he seguido con mi carrera y mi credibilidad. Yo le hice entender a la gente cómo había que actuar con el HIV, cómo había que cuidarse. Eso me lleva a un proceso que me desgasta mucho emocionalmente», aseveró.
«En mi resiliencia de vida llegó el cáncer. Eso me lleva a entender… pero al principio no quería darme cuenta de que algo me estaba pasando. Me empecé a olvidar de las letras de las canciones. Eso fue en el 2017, me di cuenta de que ya no me acordaba de lo que decía en el monólogo de la noche anterior. Lo dejé pasar», dijo Aníbal Pachano.
«A mitad de año me empecé a perder. Hice una interconsulta donde descubrieron toda una batahola. Lo bueno es que la gente pueda entender que no hay que asustarse cuando se te plantea una situación así, sino resolver. Es como tener una gripe un poquito más fuerte. En el HIV me apoyé en una flor. Yo leí ‘positivo’ y pensé que no tenía nada. Un amigo me dijo que tenía la enfermedad», expresó.
«Me refugié en una flor. Me atendí rápidamente. De la misma manera me pasó con el cáncer. Me dijeron que había un problema en el pulmón que se disparó al cerebro. Tenía seis tumores. Me agarró como una especia de llanto con risa ‘se me explotó la cabeza’. Tomé la decisión de que tenía que ir para adelante. Tengo tres médicos impresionantes, el neurólogo, el oncólogo y el cirujano me dieron toda la tranquilidad», sentenció.
