Según informó el periodista Federico Cristofanelli en el medio digital Infobae, después de que en las últimas horas se anunciara la rescisión del contrato de Esteban Rolón, Boca podría anunciar la salida de otro de los jugadores del plantel profesional y es Cristian Lema. El Consejo de Fútbol ya le propuso al defensor de 35 años concluir el acuerdo firmado que lo une al club boquense hasta fin de año, pero todavía no recibió respuesta.
El problema para el jugador es que ayer cerró el mercado de pases, por lo que se le redujeron las opciones para ser fichado por un equipo argentino, aunque ya había desestimado algunos intereses de Belgrano de Córdoba y Newell’s Old Boys. Ahora es muy posible que encuentre una alternativa en el exterior o que se quede a cumplir el resto de su vínculo hasta fin de año pese a no ser tenido en cuenta por el Director Técnico, Miguel Ángel Russo, quien le había anticipado que no lo usaría antes del Mundial de Clubes.
El futbolista sufrió una lesión a fines de octubre de 2024 por la que fue intervenido quirúrgicamente en un tobillo y por eso es que no juega oficialmente desde entonces. Luego inició la rehabilitación cuando todavía Fernando Gago era el entrenador y sufrió una dolencia muscular cuando estaba por volver, a principios de 2025. Apenas fue convocado para algunos partidos -suplente en cinco de ellos- entre el ciclo de “Pintita” y el interinato de Mariano Herrón.
En este contexto, la directiva y el cuerpo técnico encabezado por el propio Russo han optado por reducir el plantel, que se había vuelto excesivamente numeroso para un calendario limitado. La primera señal concreta de esta reestructuración fue la rescisión de contrato de Rolón, que dejó la institución al margen de estar ligado al elenco hasta fines de 2026. La partida se produjo de mutuo acuerdo, algo que todavía no ocurrió con el ex Lanús.
Quienes ya recibieron la notificación de que no entrarán en consideración son Sergio Romero, Marcos Rojo y Marcelo Saracchi. Cada caso presenta matices propio ya que, en el caso de “Chiquito”, la relación con la hinchada se quebró tras un incidente en La Bombonera, cuando respondió a insultos tras una derrota en el Superclásico con River. Desde entonces, perdió la titularidad primero con Leandro Brey y quedó aún relegado producto del arribo de Agustín Marchesín.
