En Boca todavía no está todo dicho en este mercado de pases. Tras la cesión de Marcelo Saracchi al Celtic de Escocia, se abrió una ventana para que el club incorpore un nuevo refuerzo antes del 31 de agosto. Sin embargo, la decisión final aún no está tomada y Juan Román Riquelme no la tomará solo: la resolverá junto a Miguel Ángel Russo.
La reunión clave en Ezeiza
Según reveló el periodista Diego Monroig en SportsCenter, el presidente y el entrenador se encontrarán en el Predio de Ezeiza para definir si se activa la búsqueda de un refuerzo o si se da por cerrado el plantel. “No hay un sí ni un no. Todavía no lo tienen definido, van a tener que tener una celeridad muy importante. Tendría que haber fichajes y salidas”, explicó.
En este sentido, la conversación entre ambos marcará el rumbo en los últimos días de la ventana. La idea es que, en caso de avanzar, se trabaje de manera inmediata para concretar la llegada del nuevo jugador.
La salida de Saracchi y el caso Taborda
La baja de Saracchi, quien ya tiene todo listo para sumarse al Celtic, no sería la única en el corto plazo. Otro futbolista con chances de emigrar es Vicente Taborda, actualmente a préstamo en Platense pero con el pase perteneciente a Boca.
El Panathinaikos de Grecia ofreció 4,5 millones de dólares por su ficha y se perfila como el destino más probable. En paralelo, el Hellas Verona de Italia también mostró interés, aunque solo propuso un préstamo con opción de compra, algo que no convence del todo en la Ribera.
¿Refuerzo o plantel cerrado?
Con este panorama, el Xeneize enfrenta días de definición. Riquelme y Russo deberán resolver si la salida de Saracchi amerita la llegada de un reemplazo o si el plantel actual alcanza para competir en lo que resta de la temporada.
El reloj del mercado corre y la decisión conjunta entre presidente y DT será determinante para saber si Boca pega un golpe sobre la hora o se queda con lo que tiene.