El Gran Premio de Países Bajos dejó uno de los capítulos más emotivos en la corta carrera de Franco Colapinto. El piloto argentino de Alpine tuvo su mejor rendimiento desde que llegó a la Fórmula 1, quedando muy cerca de sumar puntos. Pero lo que sorprendió a todos fue la visita especial que recibió en el circuito: Paulo Dybala, campeón del mundo en Qatar 2022, estuvo presente para alentarlo.
El encuentro con Dybala
El cordobés viajó a Zandvoort tras reaparecer con la Roma y compartió un momento con Colapinto. Hubo intercambio de obsequios, charlas y un mensaje de aliento que emocionó al piloto. “Es un privilegio que Franco nos represente, que sea tan querido por la gente. Vi muchas camisetas y banderas argentinas, le hacemos el aguante”, expresó Dybala en diálogo con Fox Sports.

Más allá del gesto, el delantero dejó un consejo valioso: “Es parte del deporte que a veces las cosas no salgan. Franco está empezando, es muy joven y tiene todo por delante. Solo trabajando se llega a lo más alto”, afirmó.
Un futuro alentador para Colapinto
El resultado en Zandvoort sirvió para dejar atrás las dificultades iniciales y abrir una nueva etapa en su primer año con Alpine. A diferencia de las carreras anteriores, las que se vienen serán en pistas que ya conoce gracias a su experiencia previa con Williams en 2024.
El próximo desafío será en el Gran Premio de Italia en Monza, escenario donde debutó en la F1. Luego llegarán compromisos en Bakú, Singapur, Austin, México, Interlagos, Las Vegas, Qatar y Abu Dhabi, trazados en los que el argentino ya corrió y que podrían darle mayor confianza.
La clave estará en el rendimiento del A525, que deberá estar a la altura para competir con los mejores. Si logra continuidad, Colapinto tendrá chances reales de acercarse a los puntos y consolidarse en la categoría.
Entre críticas y reconocimiento
Mientras algunos en la F1 cuestionaron decisiones de equipo que lo perjudicaron, el rendimiento del argentino generó elogios e incluso obligó a Flavio Briatore a retractarse de declaraciones negativas previas. Para Colapinto, el fin de semana en Países Bajos fue un punto de inflexión y una señal de que su proyecto en la máxima categoría empieza a tomar vuelo.