El encuentro de Boca contra Colón que finalizó 1-1 el último domingo en La Bombonera dejó mucha tela para cortar. En primer lugar quedó establecido que el campo de juego no está en condiciones, razón por la cual Juan Román Riquelme confirmó la mudanza a la cancha de Vélez. Pero no fue lo único que dijo el ídolo.
En diálogo con ESPN, el vicepresidente Xeneize habló de lo que mostró el equipo e cancha y realizó una crítica más que curiosa contra el equipo. “Somos un equipo muy bueno, muy inocente en el buen sentido de la palabra. No hacemos tiempo, no hacemos faltas, no cortamos el juego”, comentó, algo que si bien no lo dijo de mala manera, si lo esbozó como queja.
Dentro de la misma línea agregó: “Somos un equipo muy sano. Cuando el arquero de Colón salió jugando y la pelota le quedó a Salvio, Toto fue a patear y Lértora, como corresponde, le tocó el pie de atrás… Yo ahí me doy vuelta y le pido amarilla al árbitro, y como ya estaba amonestado debían expulsarlo”, afirmó Riquelme, señalando la actitud del hombre que ahora lleva la 10.
“Yo era tramposo para jugar, sabía quién estaba amonestado y quién no. Y Toto es más sano que el agua y siempre pensó que podía marcar el gol”, agregó el ídolo de Boca, que siente a su equipo le falta ponerse más duro en los partidos. Esto también no solo es una crítica para los jugadores, sino también para el cuerpo técnico de Sebastián Battaglia como cabeza de grupo.
Riquelme y su relación con Palermo
Por último, el Diez colocó a otro ídolo de la institución como ejemplo de cara a lo que se viene. “Mañana tiene que tener cada uno en su lugar. Palermo fue el más grande de todos dentro del área y en los centros se te tiraba encima. Era tramposo. Eso es ser mañoso. A mí me tocaba mirar si el 4 cierra bien, si el 5 lo hace. Ese era mi trabajo”, concluyó. ¿Le harán caso?
