En las últimas horas del martes comenzó a consolidarse lo que será la salida de Jorge Carrascal de River rumbo al CSKA de Moscú. Esta operación sin dudas que es sorpresiva, ya que se da sobre el final del mercado de pases, aunque lo cierto es que su representante hace tiempo que estaba buscando ofertas del exterior para llevarse al colombiano.
Finalmente la operación se cerró a préstamo por seis meses con un cargo de 300 mil dólares más una opción de compra que será obligatoria si el jugador es parte de al menos el 50% de los encuentro por un monto de 3 millones de dólares. Por último se estableció para más adelante la venta de otros 30% del pase en otros 3 millones dólares, mientras que el Millonario se quedará con un 20% de una futura venta.
El origen de la deuda
El caso es que parte de ese dinero River deberá destinarlo al pago de una deuda que no es tan conocida. Resulta que en su momento Carrascal llegó a préstamo por un año con un cargo de 500 euros proveniente del Karpaty de Ucrania, y luego de ese 2019 se ejecutó una opción de compra que estaba valuada en 2,5 millones de dólares.
Lo curioso es que los de Núñez nunca abonaron este monto, ya que en su momento se acordó tras algunas charlas mediante el grupo empresario que trajo al colombiano, que se abonaría dicha cifra una vez que se haga efectiva una venta. De esta manera, es prácticamente un hecho que River comenzará a saldar su deuda, tal y como se había pactado.
De esta forma, el Millonario pudo tener a Carrascal sin haberlo pagado durante los últimos tres años, una cuestión que en su momento generó un reclamo por parte del Karpaty pero que luego se solucionó con un acuerdo entre las partes. Ahora será Moscú el próximo destino del colombiano, mientras que los de Núñez comienzan la búsqueda de un reemplazo.
