Fuertísimo. Así fue el descargo que dejó Baby Etchecopar en su programa de Radio Rivadavia, «Baby en el medio». Siempre dispuesto a decir lo que piensa, el periodista lanzó un duro editorial relacionado con los derechos humanos, dejando muy en claro lo que piensa. Delante de cada uno de los oyentes, se mostró furioso y apuntó contra el gobierno nacional.
«Gracias a acostumbrarnos a la mentira y la necedad cotidianamente, a los discursos ridículos de Cristina, Máximo Kirchner, y de que todos estos mediocres y necios estén en el poder… empezamos a consumir relatos ridículos. Pero no por ser ridículos fueron menos nocivos, como por ejemplo, ‘Mis familiares murieron en Auschwitz y yo fui torturado. Por eso ahora cobro y hablo de derechos humanos'», comenzó disparando.
«Tengo infinidad de amigos cuyos abuelos han muerto en Auschwitz y son buena gente que trabaja. Si un día alguien les roba te dicen ‘a los que te roban tenés que matarlos’. Vos le preguntás si es nazi y te dice ‘No, soy judío, pero no me gusta que me roben’. Acá se ha mezclado a los delincuentes con los derechos humanos, los mentirosos. Ahora empiezan a caer como peras maduras los relatos, las mentiras…», aseveró.
No se guardó absolutamente nada
Delante de cada uno de sus oyentes, Baby Etchecopar fue por más. «El peor de los relatos es que Cristina y Néstor estuvieron presos por ser Montoneros, cuando en realidad los llevaron un día por no tener documentos. Los llevaron dos horas y los fueron a buscar. ‘Yo sé lo que es la tortura’, dijo uno. Mentira, mentiroso sinvergüenza. Mentirosos como para esconder la plata, como para decir que son pobres, como para inventar un relato cínico y dejar un fantoche como Hebe de Bonafini al frente de algo tan importante para el hombre, como son los derechos humanos», arremetió.
«Dicho sea de paso, fueron destruidos por los Montoneros, el ERP y los militares. Una guerra civil entre ellos, donde nosotros no tuvimos nada que ver, pero que estamos pagando. Donde los que ganaron fueron los Montoneros y el ERP, con un relato embustero abusador, hasta pagamos para que nos relaten como si fuese una epopeya. Sumando a gente desagradable como a Pérez Esquivel, por el solo hecho de haber negociado un Nóbel en la época de la dictadura. De haber sido un maltratador de alumnos, de golpearlos en la nuca, pegarles trompadas… Nos empezaron a vender un montón de cosas como que eso era el futuro de la Argentina, como que que se beses dos hombres o dos mujeres es más válido que se besen una mujer y un hombre. Todo tiene la misma validez», arremetió sin rodeos.
