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ESPECTÁCULO

La emoción de un participante del ciclo de Guido Kaczka: «Cómo debe estar»

Un ciclo donde los sentimientos están a flor de piel, y en el cual se dan a conocer diferentes historias delante los televidentes.

Guido Kaczka

Realmente conmovedor. Así fue lo que se vivió en «Los Ocho Escalones del Millón», el programa que lleva adelante Guido Kaczka a través de la pantalla de Canal Trece. Esta vez, el protagonista de un momento movilizante, fue José Luis, un jubilado de 70 años que llegó al ciclo de entretenimiento para poder cumplirle el sueño a su nieta.

«José Luis Trigo, 70 años, jubilado, empleado administrativo en la Universidad de La Matanza era, vive en Merlo. Tiene sus hijos, que los quiere ayudar, y además la fiesta de 15 de la nieta. Contestó el 95 por ciento de las preguntas bien», comenzó manifestando el conductor en un comienzo, y luego, dio más detalles ante la mirada atenta de los jurados.

«José Luis, un millón de pesos José Luis, con dos luces verdes de ventaja. José Luis que es jubilado, 70 años, que está en pareja hace 15 años, tiene dos de sus hijos viviendo en El Bolsón, quiere ayudar a sus hijos y también a su nieta. Ay, José Luis, ¿cómo se llama la nieta?», le preguntó al participante, quien respondió que el nombre es Olivia. «Ay Olivia, cómo debe estar. El abuelo, el ganador del millón de pesos esta tarde«, finalizó Guido Kaczka.

Otra fuerte situación

Días atrás, fue Walter, un concursante no vidente, quien también decidió compartir su historia delante de los televidentes. «Me anoté muchas veces y también mi hija me anotó unas cuantas veces. Por insistencia casi. Tengo esposa y dos hijos, Katia y Daniel, un saludo para ellos ya que estoy», aseveró, mientras todos los presentes lo escuchaban con atención.

«Mi hija me decía hoy nos sacas de pobres, a ver si con esto somos un poquito menos pobres», bromeó sobre lo que sucedió en su hogar antes de que fuera partícipe de uno de los ciclos más exitosos de la señal del solcito, en la actualidad. «Me decía que no me desmaye, porque antes de entrar estaba un poquito nervioso», finalizó.

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