El miércoles, el INDEC dio a conocer la inflación del mes de marzo. El número que arrojó fue de 6,7%. El porcentaje que anunció el organismo fue el más alto de los últimos 20 años. Algunos miembros del oficialismo y el Gobierno tratan de despegarse de la cifra. Uno de ellos es Axel Kicillof. El gobernador bonaerense lanzó su propio programa «anti inflacionario» y, además, sostuvo que «es tarea de Nación«.
El tema principal que preocupa a la Casa Rosada es la inflación. En tres meses ha habido un aumento de precios siderales. Se estima que puede superar el 60% anual. En el Gobierno quieren frenar un problema que afecta severamente los bolsillos de los argentinos. Axel Kicillof sabe el malestar social por el incremento de los valores. Es por eso que se despega de la gestión de Alberto Fernández.
A principio de semana, junto al secretario de Comercio, Roberto Feletti, anunció un plan para que los bonaerenses accedan a precios más bajos. Pocas horas antes de que se confirme la alta inflación, el gobernador de la provincia de Buenos Aires se quitó las responsabilidades: «Alinear las variables para que no se afecte el consumo de las clases populares, es tarea de Nación», consideró.
Pese a las medidas tomadas por la gobernación, Kicillof no quiso tomar responsabilidades del Gobieno: «La provincia no tiene los instrumentos propios de la economía nacional«, aseguró. «En la provincia de Buenos Aires con la preocupación que nos trae esta situación, tenemos que asegurar el acceso a los alimentos y que se cumplan los acuerdos”, añadió en declaraciones radiales.
“Más allá de las presiones inflacionarias, de que la reactivación genere más ingresos, el problema es que a los ingresos no se los coma la canasta alimentaria o la inflación. Hay que hacer valer la presencia del Estado defendiendo y cuidando los bolsillos”, prosiguió contra la administración de Alberto Fernández. Kicillof, ante la falta de solución, se vuelve a acercar el kirchnerismo. Así fue que hizo un acto con Máximo Kirchner hace pocos días.
