Un grupo de países pedirán este jueves a la Organización Internacional del Trabajo (OIT) que establezca una misión para investigar los presuntos excesos laborales en la provincia Xinjiang, en China. La semana pasada, la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos, Michelle Bachelet, estuvo en el país asiático en un viaje histórico, duramente criticado por Estados miembros de la organización .
Un comité del organismo de la ONU tiene previsto debatir este jueves el cumplimiento de las prácticas laborales mundiales por parte de China, tras calificar en febrero sus prácticas en la provincia occidental china de Xinjiang como discriminatorias, mostraron documentos de la OIT.
De ser aceptada por el comité de la OIT, la llamada misión tripartita podría arrojar luz sobre las acusaciones de que miembros de la etnia musulmana uigur de Xinjiang han sido detenidos ilegalmente, maltratados y obligados a trabajar. China niega tales acusaciones. El país es miembro de la OIT desde 1919 y ha ratificado muchos de sus convenios jurídicamente vinculantes.
La nación asiática va a argumentar durante las conversaciones de este jueves que sus leyes, reglamentos y prácticas se ajustan plenamente a los principios de la Convención sobre la Discriminación que ha ratificado, según su presentación escrita, explicaron a Reuters tres fuentes cercanas al asunto, que declinaron ser nombradas ya que las solicitudes oficiales aún no se han hecho públicas.
China aprobó en abril la ratificación de dos convenios sobre trabajos forzados, pero aún no han presentado la documentación completa necesaria para que entren en vigor. Esto puede tardar a menudo semanas o meses, dijo un funcionario de la OIT a Reuters. En su lugar, la futura misión de la OIT evaluaría las prácticas de China sobre la base de los convenios que el país ha ratificado, como el de la discriminación.
