La crisis en Ecuador se acrecienta a medida que pasan los minutos, luego de que el presidente Guillermo Lasso decretara el estado de excepción el viernes a la noche. Miles de manifestantes, entre ellos, personas pertenecientes a la comunidad indígena, encabezan protestas en todo el país, tanto en Quito como en otras ciudades: Cotopaxi, Imbabura y otras. Hasta el momento, las calles están militarizadas y hay represión al frente del Poder Legislativo.
En estos momentos, las personas concentran en la Asamblea Nacional de Ecuador, donde los legisladores se reúnen para debatir y votar las leyes. Los principales motivos de la protesta, según el periodista Pedro Brieger, son por el aumento del costo de vida y los incrementos mensuales en el gasoil. A raíz de ello, ya son 4 las personas fallecidas, aunque todavía no hay números exactos de heridos y detenidos.
Principales reclamos
Antes, los manifestantes concentraban en la Casa de la Cultura, pero cuando los militares decidieron liberar la zona con el propósito de que cedan, la gente se negó a frenar la lucha. Una de las personas que estaba allí mencionó que, a pesar de la promesa que el Gobierno de Lasso hizo sobre generar 2 millones de empleos, 7 de cada 10 ecuatorianos están desocupados.
Otro de los reclamantes expuso que el ministro de Inteligencia de Ecuador, Fernando Donoso, los acusó de formar parte de una operación más elaborada para derrocar al jefe de Estado. Ante eso, indicó que la verdadera pelea que tienen que brindar los servicios de inteligencia es contra el narcotráfico y la corrupción, no contra los civiles que reclaman por mejores condiciones de vida.
Aumentos y desempleo en Ecuador
Entre mayo de 2020 y octubre de 2021, los precios eran revisados mensualmente, por lo que el diésel casi se duplicó (de 1 a 1,90 dólares) y la nafta común subió 46% (de 1,75 a 2,55). La organización indígena más poderosa del país reclama también por la falta de empleo y la entrega de concesiones mineras en territorios nativos, y por el control de precios de los productos agrícolas y la renegociación de deudas de campesinos con los bancos.
