En la fecha 23 de la Liga Profesional, el árbitro Hernán Mastrángelo suspendió el partido entre Gimnasia y Boca por «falta de garantías». A pesar de los graves incidentes que ocurrieron en la previa y durante el encuentro que se estaba disputando en el Estadio Juan Carmelo Zerillo, imágenes como la de Marcos Rojo con la hinchada local, se pueden destacar en una noche gris para el fútbol argentino.
El central de 32 años, exjugador de Estudiantes, no estaba convocado para este partido en La Plata, aunque en su rol de referente acompañó al plantel Xeneize. Como un espectador más, Marcos vio el encuentro hasta los 9 minutos del primer tiempo, momento en el que el marcador se detuvo como consecuencia de los gases lacrimógenos. Fue entonces que el futbolista atentó a la situación, comenzó a lanzar botellas de agua para los plateistas que sufrían malestar.
¿Cómo comenzaron los incidentes?
Fuera del Estadio, la policía bonaerense reprimió con balas de goma y gases lacrimógenos, que terminaron ingresando al campo de juego y afectaron a jugadores, cuerpo técnico, terna arbitral e hinchas presentes. En un confuso episodio, fanáticos del local, que aparentemente tenían entradas, habrían querido ingresar cuando las puertas estaban cerradas.
¿Por qué no fue convocado Marcos Rojo?
El zaguero con pasado en la Selección Argentina quedó fuera de la lista de convocados para este partido porque aún no está al 100% físicamente. Recientemente, se recuperó de una lesión muscular en el gemelo de la pierna derecha. Dicha molestia lo obligó a perderse los últimos tres encuentros de Boca. Rojo se ausentó frente a Godoy Cruz, Quilmes y Vélez.
Hugo Ibarra espera contar con el central para el partido frente a Aldosivi. Aunque resta saber cuándo se jugará este partido suspendido frente al Lobo. De pasarse a la próxima semana, el entrenador de Boca podría sumar a varios futbolistas que actualmente son baja por lesión. Entre ellos está otro de los zagueros del plantel, Nicolás Figal.
