La Fiscalía de Bolivia pidió seis meses de prisión preventiva para el líder opositor Luis Fernando Camacho, gobernador de la próspera Santa Cruz, debido am riesgo de que abandone el país antes de un posible juicio en su contra. Esta imputado en la causa por el golpe de Estados que obligó al expresidente Evo Morales a renunciar y abandonar el país.
Tras su detención, se realizaron masivas protestas en la madrugada de este jueves en Santa Cruz. Tras ser trasladado en helicóptero a La Paz para que declara ante el fiscal. El dirigente se acogió a su derecho al silencio. Pero denunció ante el representante del Ministerio Público que fue víctima de un “secuestro brutal”, informó NA.
Según afirma el acta, Camacho también agregó: “Quiero dejar en claro que soy orgulloso y llevo en alto de haber formado parte de la lucha más grande de la historia de Bolivia por la libertad y la democracia”. Horas después del arresto, los ciudadanos de la región de Santa Cruz invadieron las calles y hubo fuertes incidentes.
Medios locales revelaron que tres edificios fueron incendiados. Entre las estructuras afectadas se encuentra la Fiscalía departamental, el edificio del Consejo Nacional de Lucha contra el Tráfico Ilícito de Drogas (Conaltid) de la localidad y la residencia de un funcionario de gobierno. Las llamas se extendieron a vehículos y otras residencias cercas.
En este contexto, el líder cívico de Santa Cruz Rómulo Calvo, anunció una lucha pacífica por la liberación de Camacho. Además, exigió al presidente Luis Arce, “la inmediata liberación” del dirigente opositor para “evitar la innecesaria confrontación que su Gobierno pretende instalar” en Santa Cruz.
