Horacio Rodríguez Larreta aseveró que el Gobierno nacional no puede inventar ninguna «bomba» para dejársela a la próxima administración. El jefe de Gobierno porteño siguió en su postura de no anunciar ninguna candidatura. Al momento se encargó de diferenciarse de aquellos que utilizan los gritos y violencia para diferenciarse.
El alcalde de la Ciudad de Buenos Aires desestimó la posibilidad de que el Gobierno nacional esté preparando un contexto negativo para quien le toque asumir en diciembre del 2023: «Con el pan a $500, como está en el supermercado, con la leche a $240, la bomba ya está. No tenemos que esperar al final Gobierno. La gente ya está angustiada, no llega al fin de semana. Con la delincuencia que hay, la bomba ya está», destacó en TN.
Por otra parte, opinó sobre los desmanes que ocurrieron en el Congreso entre diputados oficialistas y opositores. «Yo hablé con Cristian Ritondo y por lo que me contó, no hizo ningún gesto a Cecilia Moreau. Además, venían de agredirlo, gritarle e insultarlo. Insultos que tienen que terminar con la grieta que nos lleva a extremos que no sirven», subrayó.
A continuación fue el momento en el que se adentre en lo que se aproxima con las elecciones. «Estoy convencido que la mayoría de los argentinos quieren la paz. No ven bien la violencia y agresión como parte de la política. Es lo que pienso y recojo en cada lugar del país que me toca visitar», indicó el gobernador porteño sobre las acusaciones cruzadas dentro del mismo espacio político.
Como cierre se desligó de los ataques que recibió por parte de sus mismos compañeros. Descartó replicar del mismo modo: «Jamás escucharon un comentario mío en contra de alguien de Juntos por el Cambio. Eso de gritar desde una tribuna eso no sirve para nada, eso no la mejora a la gente. La firmeza está en defender a la gente en términos concretos», concluyó.
