El Lionel Messi más desatado se vio este viernes en el Estadio Icónico de Lusail en Qatar. El capitán argentino dio una asistencia, marcó un gol y convirtió su penal para la clasificación de Argentina a semifinales de la Copa del Mundo. Tras el encuentro, Messi protestó contra el árbitro y también contra el entrenador rival, Louis Van Gaal, a quien le dedicó el gol un festejo provocador.
«Van Gaal vende que juega bien al fútbol y tira pelotazos», protestó Messi contra el reconocido director técnico después del partido. El capitán argentino se acercó al banco de suplentes tras marcar el 2 a 0 de penal, se plantó y puso sus manos sobre las orejas en el típico festejo del «topo Gigio» que hizo famoso Juan Román Riquelme. Un gesto provocador para el técnico neerlandés.
Después de la clasificación argentina, Messi también discutió con Van Gaal y con sus asistente, Edgar Davids. Más allá de la molestia durante el partido, es evidente que tanto a Messi como a otros jugadores les molestaron algunas declaraciones del técnico. Antes del encuentro, Van Gaal había cuestionado a Ángel Di María, quien lo tildó de «peor técnico» de su carrera. Y también había dicho que cuando Argentina no tenía le pelota, Messi era un jugador menos en la cancha.
El enojo de Messi con Mateu Lahoz
Más allá de la pelea con Van Gaal, Messi también se mostró molesto con el planteo de los neerlandeses. Y sobre todo con el árbitro del partido, el español Antonio Mateu Lahoz. «No quiero hablar del árbitro, porque te sancionan, no podés decir lo que pensás. La FIFA tiene que rever eso, no puede ponerlo en una instancia así, que el árbitro no esté a la altura».
Otro enojo de Messi fue tras el partido en plena entrevista. «¿Qué mirás bobo?», preguntó enojado Messi a una persona durante la entrevista que realizaba en TyC Sports luego de la clasificación argentina. El capitán del seleccionado se quedó desafiante contra quien lo molestaba. «Andá para allá», lo instó, mientras el periodista Gastón Edul intentaba calmarlo para hacer la entrevista.