Mientras miles de argentinos viven la fiebre del mundial que se desarrolla en Qatar, Marley disfruta de las grabaciones de su programa con distintas figuras del espectáculo. En estos días su acompañante fue Lali Espósito, que además comparte una relación de amistad con el conductor. Así se pudo ver en un cruce que ambos mantuvieron ayer, cuando Lali se propuso como conductora oficial del programa.
“Soy una journalist. Agárrense. En dos minutos, este programa es mío y a vos te echaban a la mierda del canal”, bromeó la intérprete de Disciplina. Sin embargo, Marley agarró el guante y reveló una situación desconocida y disparatada sobre unas fotos de Lali. “Me contó Federico (productor) que hubo unos temas con la foto para la credencial…”, respondió el conductor y continuó explicando la situación.
“Nosotros le pedimos que mandara la foto para hacerle la credencial, ¡y miren lo que mandaba!”, lanzó el presentador mostrando algunas de las fotos que la artista había enviado en un principio al equipo. Las fotos, si bien eran cuidadas y serias, tenían una producción digna de un álbum musical. Ante la risa de su amigo, Lali se defendió: “Yo quería ser una journalist sexy”.
Un viaje de amigos y trabajo
Durante la transmisión en vivo de anoche de ‘Por el Mundo Mundial’, Marley comenzó su programa con Lali Espósito, que viajó especialmente para acompañarlo esta semana. Al salir al aire, la cantante comentó entre risas: «Me están haciendo trabajar». Ahí, el conductor aclaró que en Qatar en ese momento eran las dos de la mañana. “Pero estamos listos, ‘Por el Mundo’”, expresó Lali.
Ya con el programa en marcha, comenzaron a festejar el triunfo de Argentina y su paso a semifinales. Mientras tanto, detrás de cámara comentaban: “No lo pongas nervioso (a Marley”. Frente a esto, el presentador sentenció: “No, porque viste que yo discuto”, en referencia a que, tras el partido anterior, Marley apuntó sin filtro contra el árbitro del encuentro. Allí, fiel a su estilo, Lali expresó «qué tipo reaccionario» y detrás de cámara se escuchó que comentaban: «Qué quilombero».
