Dos de los cuatro ciudadanos de Estados Unidos secuestrados en México están vivos y los otros dos fallecidos, informaron este martes autoridades locales. Además, anunciaron la detención de una persona en relación con el incidente. El grupo de estadounidenses fue secuestrado el viernes en el estado de Tamaulipas, luego de una confrontación armada entre grupos criminales.
El caso fue calificado por la Casa Blanca como «inaceptable». «Hoy, aproximadamente hace una hora, nos notificaron que había indicios de haber visto a los cuatro ciudadanos norteamericanos y hace 35 minutos ya fue completamente confirmado por la fiscalía», dijo el gobernador de Tamaulipas, Américo Villarreal.
«De los cuatro hay dos de ellos fallecidos, una persona herida y la otra con vida», detalló durante la conferencia diaria del presidente Andrés Manuel López Obrador. Un funcionario mexicano dijo a Reuters que la única mujer del grupo estaba ilesa.
La cadena ABC News dio el lunes el nombre de los cuatro secuestrados: Latavia «Tay» McGee, Shaeed Woodard, Zindell Brown y Eric James Williams. Según sus familiares, el grupo habría cruzado la frontera para un procedimiento quirúrgico, aunque López Obrador había dicho que fue para comprar medicamentos, informó Reuters.
El mandatario reveló este martes que una persona fue detenida por el suceso, que ha despertado indignación en el vecino país. Prometió que las autoridades locales buscarán y castigarán a los responsables. Aunque envió sus condolencias a los familiares de las víctimas, López Obrador criticó a quienes desde Estados Unidos han cuestionado a México por lo sucedido.
El gobernante mexicano denunció que muchas de las armas usadas por las bandas criminales locales llegan de forma ilegal desde la nación vecina, donde, además, «se consume la droga producida por los carteles mexicanos», recordó durante su conferencia matutina.
