Antes del final del primer tiempo del partido entre Boca y Monagas, por la sexta y última fecha del Grupo F de la Copa Libertadores 2023, Bruno Valdez fue expulsado por doble amarilla. Con el marcador 0-0 y una tarjeta por amonestación, el zaguero central paraguayo se excedió en su protesta ante el árbitro y el réferi no dudó en mandarlo al vestuario. El accionar del jugador del Xeneize pareció no agradarle a Juan Román Riquelme.
A los 35 minutos del primer tiempo, Andrés Matonte cobró falta de Marcelo Weigandt y Valdez, que se paró frente a frente ante el referí para protestar. El árbitro le indico que se retire, pero el defensor guaraní continuó con su reclamo hasta que el juez le mostró la segunda tarjeta amarilla. La anterior la había recibido a los 18′ por una dura falta a Édgar Carrión, quien cayó por la infracción al darse media vuelta para quedar con el arco Xeneize de frente.
En este contexto y mientras el público de La Bombonera silbaba e insultaba a la Conmebol, las cámaras de la transmisión enfocaron al palco de Román. Si bien no se llega a divisar lo que expresa el vicepresidente de Boca al reaccionar, su cara demuestra una gran disconformidad, considerando que el equipo quedaba con 10 jugadores en cancha por una insólita situación.
¿Eran penal para Boca? Mano en el área de Monagas y patadón a Merentiel
A los cinco minutos y medio del primer tiempo, Valdez envió un balón largo a la espalda de la zaga del equipo venezolano, que Martín Payero no dio por perdido. Ante esta situación, Edson Castillo cubrió la pelota para que la tomara el arquero Jorge Roa, pero antes la misma pegó en su brazo. El VAR no llamó al árbitro para revisar la jugada.
Luego, a los nueve minutos de la primera parte, Miguel Merentiel fue a trabar una pelota en el área de Monagas y el zaguero Rubén Ramírez se barrió para recuperar la pelota, pero el pie derecho pareció que se elevó de más y hasta le impactó en la pierna izquierda del delantero uruguayo del Xeneize.
