En medio de posibilidades en cuánto a la ampliación del campo de acción de las Fuerzas Armadas en la lucha contra el narcotráfico, el presidente de Paraguay, Santiago Peña, tras su visita a su par argentino, Javier Milei, hizo un repaso por las acciones más importantes que llevaron adelante en su país con respecto a esta problemática y demás situaciones de inseguridad que mantenían en vilo al pueblo paraguayo.
“Tuvimos la experiencia del EPP, el Ejército del Pueblo Paraguayo, donde hubo secuestros, fue incipiente, pero con cierto crecimiento. Tomamos la experiencia del Plan Colombia, y lo que a ellos les llevo 50 años, a nosotros 10”, aseguró en TN y detalló que al igual que el país cafetero impulsó “tareas conjuntas, con una convivencia entre la policía y militares, las cuales tuvieron repercusiones positivas. No hay desarrollo sin seguridad”.
Por otro lado, describió una de las operaciones más emblemáticas, la Veneratio en la que “tomamos el control de la cárcel, ya que el estado paraguayo no podía pasar el tercer portón de siete que había en el penal, porque los presos la manejaban”. En tanto, indicó que “el microtráfico se manejaba desde el interior, con influencia externa”.
Con respecto al accionar de las fuerzas recordó “fue terrible, desplegamos una fuerza superior, sacamos a los presos más peligrosos y los trasladamos a cárceles de máxima seguridad”. A su vez, enumeró algunas medidas implementadas desde el Ejecutivo: “creamos el Grupo Lince de policía motorizada. Tenemos 20 mil oficiales y nos reforzaremos con cinco mil más. Estamos invirtiendo 100 millones de dólares en equipamiento”.
Por último, Peña comparó la mirada hacia los militares de los dos países y consideró que “tuvimos una dictadura similar a la Argentina, pero más extensa. Esto generó un divorcio entre el sector civil y el militar, es por ello que junto a mi Ministro de Defensa estamos realizando un proceso de reconciliación, con una renovación total de la cúpula militar”.
