Boca se prepara para el debut en Copa Sudamericana 2024 ante Nacional en Potosí, pero mira de reojo lo que será el partido decisivo del sábado contra Newell’s por Copa de la Liga. En ese encuentro, el Xeneize jugará mano a mano con la Lepra por quedar dentro de los clasificados a cuartos de final, el gran objetivo de este semestre para el equipo de Diego Martínez. Pero por estos días, Luis Advíncula le da un dolor de cabeza al DT.
Martínez dejó en claro que la prioridad del equipo es la clasificación a cuartos de final del torneo local. Por eso, casi todos los titulares se quedaron en Buenos Aires esperando el partido con Newell’s y será un equipo alternativo el que enfrente a Nacional. Pero en medio de los entrenamientos, un ausente se destaca: es Advíncula, que por segundo día seguido no pudo practicar por fiebre.
El peruano ya había perdido la práctica del lunes por fiebre y pasó lo mismo el martes. La situación alarma por dos razones: primero, por la epidemia de dengue que hay en buena parte de Argentina y podría explicar los síntomas del defensor, aunque todavía no hay un diagnóstico y parte médico publicado. Por el otro, por la falta de variantes que hay en el lateral derecho.
Problemas en Boca
El sábado, Lucas Blondel sufrió una dura lesión y estará ocho meses sin jugar. Mientras que Marcelo Weigandt ya fue vendido al Inter Miami. Así, Boca se quedó de repente sin variantes en el lateral derecho. Y por eso hay preocupación en el Xeneize. Si Advíncula no se recupera a tiempo, podría quedar afuera del partido contra Newell’s sin una variante clara para reemplazarlo.
En caso de no jugar ese partido, Martínez podría probar algunas variantes, como el regreso de Nicolás Figal, que ha jugado de lateral derecho en su carrera. En Bolivia, ese puesto lo ocupará Lautaro Di Lollo, central por naturaleza. Luca Langoni empezó su carrera como lateral, aunque ya en primera división se hizo conocido como delantero. Y aparece en el radar el juvenil del Sub 17 Dylan Gorosito, de gran proyección.