El fútbol argentino sufrió en las últimas horas por una noticia triste que afecta la salud de uno de los mejores jugadores de las últimas décadas en los torneos nacionales. Se trata de Omar Palma, histórico ídolo de Rosario Central, quien supo ser jugador de River, que padeció un ACV y lucha por su vida en Rosario.
«Comunicado oficial del Hospital Italiano de Rosario sobre la salud de Omar Palma.
El paciente Omar Palma, de 66 años, ingresó al Hospital Italiano de Rosario en el día de la fecha, lunes 30 de septiembre de 2024, y fue derivado a la Unidad de Terapia Intensiva. Actualmente su estado es grave y su pronóstico es reservado», informó Central el lunes tras conocerse la triste noticia.
Este martes, se dio a conocer un nuevo parte médico. «El paciente continúa en estado crítico con pronóstico reservado. Ayer, después de ser ingresado, se le realizó una intervención quirúrgica, además de una embolización cerebral. En este momento, permanece en la Unidad de Terapia Intensiva con asistencia ventilatoria mecánica», informó el club Canalla.
«Está lamentablemente internado, en estado crítico. Esperando cada parte con mucha expectativa de que pueda mejorar, pero es grave el estado de salud de uno de los mejores jugadores de la historia de Central», agregó a su vez el periodista Fernando Carrafiello desde Rosario en Radio La Red.
Palma sigue vinculado a Central y de hecho había estado el sábado junto a Miguel Ángel Russo y otros exjugadores del Canalla viendo a los partidos de las divisiones juveniles. Una imagen que compartió la cuenta del club rosarino en redes sociales, horas antes del triste episodio que ahora lo tiene luchando por su salud.
El paso de Palma por River
El «Negro» Palma hizo buena parte de su carrera en Central, aunque también supo jugar en River. En el Millonario disputó dos temporadas, llevando la camiseta número 10 entre 1987 y 1989, aunque con éxito escaso. Conquistó un título, la Copa Interamericana, y su momento más recordado es un gol a Boca en un clásico para ganarle 3 a 2 en el Estadio Monumental.
Sin embargo, en Central es uno de los máximos ídolos. Pieza clave del equipo que ascendió y fue campeón de primera división en años consecutivos, disputó casi toda su carrera en el equipo rosarino y ganó tres títulos hasta su retiro en 1998. Luego tuvo un breve paso como director técnico.
