Con el paso de los años, Martín Liberman se ganó un lugar dentro del periodismo deportivo por sus fuertes opiniones sobre los grandes protagonistas del fútbol argentino. El conductor siempre mantuvo sus posturas, por más que sean polémicas o contrarias a las de la mayoría. Y ahora no dudó en seguir fiel a su estilo y atacó con todo a Juan Román Riquelme y los dirigentes de Boca: «Soberbia y malicia».
Todo se dio a partir del flojo rendimiento que mostró el conjunto azul y oro frente a Huracán. La derrota del Xeneize en La Bombonera ante el «Globo» disparó una gran cantidad de reflexiones de parte del periodista, quien empezó criticando a Marcos Rojo por su nivel individual: «¡Cómo lo inflaron a Rojo, mi Dios! Jugador normalito que se hizo amigo de un grupo que ponía y sacaba. ¡Izquierdoz es mucho más que él!».
A través de su cuenta personal de Twitter, Liberman castigó con todo a Riquelme y el consejo de fútbol ni bien finalizó el encuentro. «¡Esta dirigencia llegaba a revolucionar el fútbol! Hace 27 meses que están. Su Boca cada vez juega peor. Nunca tuvo identidad. Hacen y deshacen con soberbia y malicia. Eligen técnicos dóciles. Futuro incierto. ¿En serio les gusta la presidencia de Roman (el profe de bocha es testigo)?», deslizó.
Más críticas
Un seguidor le respondió: «Martín, por eso muchos no te quieren. ¡Decís la verdad y eso duele!». Y él aprovechó para sacar pecho por la forma de expresarse que utiliza desde que está en los medios. «Es que a mí no me importa lo que opinan de mi! Solo me interesan mis amigos, mi familia y mis compañeros. ¡No estoy para agradar! ¡Lo que nunca haré es chuparle las medias a los dirigentes! Y menos dejarme apretar, aseguró.
Liberman siguió con sus fuertes críticas a la comisión directiva del club de la Ribera. «Boca juega siempre mal. El que ve otra cosa, que me explique. Es un espanto hace 27 meses. Algún partido con Russo y Tevez y nada más. Qué patético que la gente quiera más a un ídolo que su camiseta. ¡El mundo del revés!». Y recordó: «Y no se coman el cuento de la austeridad… ¡Gastaron más de 20 millones de dólares desde que llegaron!».