Hace algunas semanas se desató un verdadero escándalo en Boca con lo que fue la discusión entre Agustín Almendra y Sebastián Battaglia, lo que terminó con el volante relegado y bajando a la Reserva. Lo más fuerte de todo llegó después cuando Darío Benedetto no tuvo ningún tipo de piedad con el volante a quien liquidó frente a las cámaras.
“Hay que respetar al entrenador y a los compañeros siempre. Agustín nunca entendió la camiseta que tenía puesta, con él no hay vuelta atrás. Lo de Agustín ya no tiene vuelta atrás. Hablamos muchas veces con Almendra, ya hubo otros problemas y había que cortarlo de raíz. Le sobra nivel para jugar pero no mentalidad, trataron de ayudarlo y no lo aprovechó”, lanzó Pipa.
De esta manera parecía imposible que las cosas se solucionen entre el volante y el delantero que llegó de Europa no solo para dar un salto de calidad en cuanto a lo futbolístico, sino también para asumir un rol de liderazgo. Lo que nadie esperaba después de esta situación es el gesto que tuvo el goleador en las últimas horas.
El día lunes jugó la Reserva de Boca, la cual venció con mucha comodidad a Lanús y donde Almendra convirtió un tanto. El que fue a ver al volante fue justamente Benedetto, acompañado por otros compañeros, por lo que parece que los resquemores fueron cesando, y ahora se abre la posibilidad a que el mediocampista regrese a primera.
Todo depende de la decisión que tome Battaglia, quien hace algunos días aseguró que no iba a modificar su decisión. Por lo pronto, lo que se puede decir es que la relación de Almendra con el resto del plantel va mejorando, sobre todo después del pedido de disculpas del jugador, tanto en privado como en público. ¿Regresará?