A lo largo de los últimos meses, Exequiel Zeballos se volvió una pieza fundamental para el plantel profesional de Boca. El delantero surgió desde la Reserva y demostró toda su calidad en la Primera de una manera muy rápida. Ahora es uno de los desequilibrantes del equipo y goza de un buen presente. Sin embargo, José Basualdo habló de él y arremetió con todo, con un pedido especial: «Hay que darle un correctivo».
¿Qué pasó? La imagen del «Changuito» enojado en la derrota contra Patronato de Entre Ríos en la que se lee en sus labios que dice «Mamita, boludo…» mientras el Xeneize perdía por 3-0 generó todo tipo de opiniones. Y el «Pepe» cree que no estuvo bien: «Ningún DT le dice que no haga gestos, hay que darle un correctivo. Se está equivocando. A veces los técnicos no quieren decirle nada a Zeballos porque anda bien, pero hay que marcarle los errores».
Además, Basualdo también atacó a la figura de Darío Benedetto tras la polémica con sus fallos en la Copa Libertadores, sus declaraciones tras el escándalo entre el plantel y los dirigentes y su nivel actual. «Metió seis goles y le dicen goleador, pero goleador era Martín (Palermo)», diferenció el exmediocampista, en referencia al enorme legado del «Titán» con respecto al aporte del «Pipa».
Más de Basualdo
Por otro lado, Basualdo también opinó sobre las negociaciones entre Boca y Agustín Rossi y fue claro. «Para mí, se hizo muy tarde. Si el club no te acerca una oferta, es lógico que el jugador busque otras opciones. Si lo querías, lo tenías que haber abrochado antes. Después siempre le echan la culpa al jugador, pero hay una vida para él. Tiene que explotar diez años de carrera para poder hacer un colchón», afirmó.
Además, el exjugador multicampeón con el conjunto azul y oro comentó que ahora la exigencia es mucho menor a la de su época. «Palermo y Riquelme pusieron una vara muy alta que ahora no se encuentra. Hoy juegan seis partidos bien y se ponen el cartel de ídolo. Parece que es normal que haya problemas extrafutbolísticos. Es una lástima y no tendría que ser normal», sentenció el «Pepe».
