Boca ya comenzó a moverse en el mercado de pases pensando en armar el mejor equipo posible con la Copa Libertadores como objetivo. Ante la baja de Marcos Rojo, quien sufrió la rotura de ligamentos cruzados, la búsqueda pasa por un marcador central de peso y el gran sueño de Juan Román Riquelme es poder sumar a Walter Kannemann.
El zurdo que se formó en San Lorenzo es uno de los capitanes de Gremio, aunque lo cierto es que ahora mismo hay una incógnita muy grande respecto a su futuro. Es que su contrato con el conjunto brasileño termina en diciembre de este año y lo cierto es que aún la dirigencia no se comunicó con él para establecer un nuevo vínculo.
Teniendo en cuenta que puede quedar libre para Boca es la oportunidad ideal para conseguir a un hombre que fue de Selección, que además sabe lo que es ganar la Copa Libertadores y a costo cero. Pero acá aparece la intención del jugador quien en los últimos días habló sobre esta situación y dejó bien en claro que tiene ganas de renovar en Gremio.
“Me gustaría quedarme aquí. Tengo dos hijos nacidos aquí. La primera opción es quedarse aquí. Eso sí, a veces los tiempos se acaban, así es la vida”, comentó. El que también habló es su representante. “Boca siempre lo quiso, pero esta vez no me contactó. Hace dos años, sí. Pero luego Gremio no quería soltarlo”, afirmó.
En la misma línea agregó: “Muchos clubes vinieron a mí ahora para preguntar por él. Han llamado de tres clubes en Argentina, pero la situación financiera del país es mala. De Europa también me vinieron a buscar, pero Walter quiere quedarse en Gremio”, sentenció. De esta manera parece que la chance para Boca parece esfumarse.
