Pablo Alarcón tuvo una carrera próspera en la actuación, sin embargo, en los últimos años vivió una crisis. Tal como lo había comunicado en “PH podemos hablar” el fin de semana pasado, el famoso intérprete habló del proyecto con el que pudo solventarse durante la pandemia en una charla con Marcela Tinayre, que se emitió por Net TV.
“Teatro delivery, es una opción para generar un ingreso económico, el emprendimiento se llama ‘El cocinero está frito’, voy a la casa de la gente, habló con ellos y cocino un menú que coordino con la persona que me contrata”, explicó en “Las Rubias”.
Y detalló: “No son espectadores, son actores también, son parte de la historia que se genera en ese hogar”. “Hay que tener actitud en la vida para lograr lo que uno quiere hacer, por más mínimo que sea”, señaló posteriormente sobre la consigna que le plantea a sus clientes.
Más adelante en el reportaje, Alarcón habló de la vez que la Triple A quiso detenerlo y su fama lo salvó: “Vienen a casa a buscarme y a revisar si tenía una película, preguntan si era Pablo Marabotto, mi verdadero nombre, y respondí enseguida ‘Pablo Alarcón’”.
“El tipo, me dice: ¿vos no sos el que labura en la novela?. Sí, le respondo. ‘Uh, me equivoqué, muchacho. No te puedo hacer nada a vos, mi mujer me mata si te hago algo, sos el ídolo de ella. Me pidió un autógrafo. Me dio un beso en la mejilla y se fue”, reveló sobre lo que vivió en los 70, una época compleja en Argentina.
