La Navidad llegó pero los conflictos en la casa de «Gran Hermano» siguen a la orden del día. Resulta que el reingreso de Juliana por decisión de sus compañeros tuvo grandes repercusiones dentro del programa de Telefe pero también causó diversas reacciones en una parte del público que pidió la expulsión de la joven a días de la segunda oportunidad que le dieron en el reality.
El jueves pasado, Santiago del Moro contó en vivo que Juliana filtró información del exterior en repetidas ocasiones y por eso obtuvo una sanción triple. Desde la producción del programa del momento determinaron que la «hermanita» queda automáticamente nominada, que no podrá votar en la próxima gala y además la eximieron de la «prueba del líder».
Si bien ese dato es conocido por los televidentes, parece que Juliana recién sabrá los detalles de la sanción el lunes. Lo cierto es que los fanáticos del programa plantearon una penalización más dura porque la pareja de Maxi, participante oriundo de Córdoba, siguió revelando detalles sobre lo que pudo observar desde afuera después de su eliminación.
La santafesina les dijo a sus pares en el juego que Thiago no es tan fuerte como lo perciben en la casa y habló del gran apoyo que adquirió Marcos con su paso lento pero firme en el certamen. Además, expuso varias jugadas de Coti que resultaron sorprendentes para algunos de los competidores que ya llevan cerca de dos meses aislados.
Fuerte descargo
Antes de volver al juego, Juliana participó de varias entrevistas en las que mostró su desacuerdo con algunos aspectos del formato. «Fue re loco, porque nosotras contamos cosas muy fuertes, cosas muy nuestras, ahí, como varias de las chicas, de los chicos. O charlas que tuve con Maxi, muy profundas, muy copadas, que siento que siempre se muestra lo más picante, lo más sucio, por ahí lo más gracioso, también», dijo sobre la edición que se hacen de las filmaciones de las 24 horas.
