En la Ciudad de Buenos Aires quedó muy latente el asunto acerca del rol del ministro de Seguridad, Marcelo D’Alessandro, en el caso de los viajes a Lago Escondido. A raíz de esto, el dirigente del PRO se tomó licencia de la cartera de la Ciudad de Buenos Aires, mientras que ahora, luego de reunirse con Horacio Rodríguez Larreta, anunció su renuncia.
«En 2016 asumí un enorme compromiso con la seguridad de la Ciudad. Hoy, después de siete años, le comuniqué al Jefe de Gobierno mi decisión de dar un paso al costado para convertirme en querellante de la causa que investiga la operación ilegal de inteligencia en mi contra», indicó el funcionario porteño en su cuenta de Twitter.
En este mismo sentido, remarcó que «no aflojé ni un solo día y me voy con el orgullo, la satisfacción y la tranquilidad de haber logrado los menores índices delictivos de los últimos 28 años. Convertimos a Buenos Aires en la capital más segura de Latinoamérica. Haber liderado este equipo, será siempre un hito de mi carrera y mi vida», aseveró.
También le agradeció a «Horacio y a los que me acompañaron en esta difícil tarea, a mi familia, a mi equipo y, en especial, a los policías, bomberos y agentes que todos los días arriesgan su vida para cuidarnos» dentro de la Ciudad de Buenos Aires. De esta manera, se retiró del gabinete porteño, aunque no pasó por alto su situación judicial ni sus acusaciones en contra.
Marcelo D’Alessandro se defendió
Por otra parte, el exministro de Seguridad sostuvo que «ninguna operación va a borrar la satisfacción personal y profesional de haber enfrentado a los delincuentes para que los vecinos vivan más seguros. Aún queda mucho por hacer y espero que se continúe por el mismo camino. Sobre el hackeo, ya tenemos los responsables. Ahora vamos a encontrar al que lo ideó, financió y ordenó. Todos y cada uno de ellos van a tener que dar explicaciones ante la Justicia. Los argentinos merecemos saber la verdad. Esto no va a quedar impune».
