El Gobierno nacional ha decidido aplazar los pagos de deuda con el Fondo Monetario Internacional (FMI) que correspondían al 9 y 16 de enero y hacia finales de este mes. La medida busca ganar tiempo mientras se llevan a cabo negociaciones en curso con el FMI para renegociar el acuerdo vigente que dejó el ministro de Economía saliente, Sergio Massa.
De acuerdo a datos de la agencia NA, la decisión de postergar los pagos es una estrategia utilizada anteriormente por Argentina, ya que el país realizó una acción similar en junio, julio y octubre del año pasado bajo la gestión de Sergio Massa en el Ministerio de Economía. Fuentes oficiales indicaron que es muy probable que se unifiquen los vencimientos del mes, una medida que se ajusta a las normas del FMI.
En diciembre, ante la falta de compromisos que permitieran agrupar pagos, el Gobierno de Milei se vio obligado a recurrir a un préstamo puente del Banco de Desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF) por un monto de US$ 960 millones para cumplir con una obligación del 21 de diciembre.
Las negociaciones actuales del ministro de Economía, Luis Caputo, se centran en refinanciar el crédito de US$ 44.000 millones tomado en 2018. A pesar de los esfuerzos, no hay indicios de la llegada de nuevos fondos por ahora. Esto fue uno de los puntos principales por los que el equipo de Milei se decidió por hacer un fuerte ajuste fiscal.
¿Qué dice Estados Unidos sobre las medidas de Milei?
La Casa Blanca, principal accionista del FMI, observa con cautela y ha expresado inquietudes sobre las medidas económicas del Gobierno argentino, particularmente la suba de retenciones. La incertidumbre en el panorama financiero persiste, y tanto la suba de retenciones al campo como otros aspectos impositivos son elementos clave en las discusiones.
En Wall Street, hay escepticismo sobre la posibilidad de que el FMI adelante fondos por US$ 15.000 millones, como se rumoreaba. Mientras tanto, el Gobierno evalúa utilizar recursos, acumulados en parte por compras en el mercado de cambios, para cumplir con pagos pendientes, incluyendo los US$ 1.600 millones que vencen el 6 de enero.
