A fines de enero Susana Giménez festejó su cumpleaños número 80 con una mega fiesta en su mansión de La Mary, tan exclusiva que la diva seleccionó cuidadosamente a sus 80 invitados. Uno de ellos fue Cristian Castro, que sorprendió a la cumpleañera con un regalo totalmente fuera de lugar.
Según se conoció, Susana Giménez fue clara con sus invitados en cuanto a los regalos que quería este año: la diva pidió objetos para su cocina y decoración para La Mary. Sin embargo, Cristian Castro no respetó sus pedidos y llegó a su casa con un cachorro Pomerania a quien llamó Blue. Aunque la diva ama a los perros, no pudo aceptar al cachorrito, y terminaron quedándoselo Barby Franco y Fernando Burlando.
En un móvil con A la tarde (América TV) Cristian Castro se sinceró y reveló que no le cayó nada bien el desprecio de Susana Giménez. «Le obsequiamos el perro, le mandamos a hacer un bolso, lo compramos en Buenos Aires, le hicimos todos los papeles, y aparentemente Susana no podía tenerlo porque ella tiene perros muy grandes», contó la novia del cantante.
«En el cumpleaños empezaron a ver quién quería el perro y se lo llevó Barby, la esposa de Burlando”, continuó, hasta que Cristian Castro la interrumpió: «Solamente digo que los regalos no se regalan. Me pareció que con una llamada se hubiera resuelto todo el asunto. Quedé con cierta tristeza. No enojado, pero si con tristeza». Antes de dar por terminado el tema, la novia del cantante sumó: «Cristian le había tomado cariño a los dos perros, entonces, previo a eso habló con la nieta de Susana y con la hija, y les dijo ‘yo veo que Susana tiene perros grandes, y lo que te pido es que si Susana no se va a quedar con el perro, me avises, porque entonces yo me quedo con el perro».
Susana Giménez abrió su corazón
A mediados del 2020, durante la pandemia del coronavirus, Susana Giménez decidió radicarse en su casa de Punta del Este, la famosa La Mary. La diva argentina incluso consiguió la ciudadanía uruguaya, y desde entonces pasa sus días allí junto a sus perros, a quienes numerosas veces demostró amar profundamente.
En este contexto, Susana Giménez habló con Revista Caras y recordó a una de sus mascotas más queridas: “Lloré mucho cuando se me murió el Cholo, mi perro adorado Weimaraner. Lloré mucho, mucho, pero mucho. Los diez años los vivió conmigo. Pegado a mí, siempre. Yo salía de hacer gimnasia y él estaba en mi cama esperándome… Él vivía para mí y yo para el Cholo”.
La diva también reveló que construyó un cementerio en su mansión de Uruguay para que sus perros puedan descansar en paz. “Todos tienen sus lapiditas. Está Clara, Rosa, Cholo y el Indio”, contó Susana Giménez. Sin embargo, aclaró que Jazmín, su querida Yorkshire, descansa en Buenos Aires: “Él está enterrado en mi casa de Barrio Parque”. “Ellos tienen mil cosas que no tiene el hombre, ellos solo te dan amor, son desinteresados, no tienen envidia, nunca esperan nada. Solo están a tu lado para cuidarte y amarte”, agregó emocionada.
