El presidente ruso, Vladimir Putin, acusó el martes a Estados Unidos de crear deliberadamente un escenario diseñado para empujarlo a la guerra y de ignorar los problemas de seguridad de Rusia en Ucrania. «Ya está claro (…) que las preocupaciones fundamentales de Rusia fueron ignoradas», dijo Putin en una conferencia de prensa junto al primer ministro de Hungría, Viktor Orbán.
En sus primeros comentarios públicos directos sobre la crisis desde hace casi seis semanas, un desafiante Putin no dio señales de ceder en sus demandas de seguridad, que Occidente ha calificado de insostenibles y de posible excusa para lanzar una invasión, que Moscú niega.
Putin describió un posible escenario futuro en el que Ucrania fuera admitida en la OTAN y luego intentara recuperar la península de Crimea, territorio que Rusia tomó en 2014. «Imaginemos que Ucrania es miembro de la OTAN y comienza estas operaciones militares. ¿Debemos entrar en guerra con el bloque de la OTAN? ¿Alguien lo ha pensado? Aparentemente no», manifestó el mandatario ruso.
«En este sentido, la propia Ucrania es solo un instrumento para lograr este objetivo», dijo Putin. «Esto puede hacerse de diferentes maneras, atrayéndonos a algún tipo de conflicto armado y, con la ayuda de sus aliados en Europa, forzando la aplicación contra nosotros de esas duras sanciones de las que hablan ahora en Estados Unidos», agregó, replicó Reuters.
Por su parte Orbán, que a menudo ha polemizado con los dirigentes europeos occidentales en relación con la democracia en su propio país, manifestó que, tras sus conversaciones con Putin, creía que había espacio para un entendimiento.
«Hoy me he convencido de que las diferencias de posición existentes pueden salvarse y es posible firmar un acuerdo que garantice la paz, la seguridad de Rusia y que sea aceptable también para los Estados miembros de la OTAN», dijo Orban.
Rusia ha concentrado más de 100.000 soldados en la frontera ucraniana y los países occidentales dicen que temen que Putin pueda estar planeando una invasión, lo que Moscú niega, pero ha dicho que podría emprender una acción militar no especificada si no se satisfacen sus demandas de seguridad. Los países occidentales dicen que cualquier invasión acarrearía sanciones a Moscú.
