El ministro de economía, Luis Caputo, opinó sobre la cruzada que existe entre los supermercados y el municipio de Lanús. Desde el comienzo del año, los supermercadistas han comenzado a presionar para que pueda exhibirse en los tickets las tasas impositivas que los municipios cobran.
El gobierno municipal de Julián Álvarez mantiene una disputa con las grandes cadenas de supermercados por el valor de las tasas. En esta oportunidad, Roberto Goldfarb, dueño Diarco apuntó contra el ejecutivo. En el podcast La Fábrica sostuvo que cerró la sucursal que tenía en el distrito por el incremento de los impuestos.
«Hay un municipio que cerré la sucursal por el costo de la tasa municipal. El último que estoy hablando es Lanús», indicó el empresario. «Hay municipios que además de cobrar tasas altísimas, te cobran en los servicios», enfatizó. Con esto, desde el gobierno de Lanús indicaron que la causa de su cierre no se debía a la presión impositiva. Por el contrario, los motivos del cierre eran la baja de ventas, producto del ajuste del gobierno nacional. Sin embargo, Luis Caputo se mostró disconforme.
La opinión de Caputo
Luis Caputo marcó la cancha en la contienda entre municipios y supermercadistas. Y, aunque desde el gobierno de Julián Álvarez apuntaron en contra de las medidas que se han tomado por el programa económico del FMI, Caputo dio su apoyo al sector privado.
«Bien los supermercados. Importantísimo desenmascar a toda esta banda de intendentes K», remarcó el ministro. Para Caputo, las intendencias recaudan más dinero, «producto de la recuperación económica». Sin embargo, «aumentan las tasas municipales y sin contraprestación alguna para el vecino».
El cruce entre el municipio y Goldfarb
Uno de los concejales kirchneristas brindó una entrevista al medio local Política del Sur. Allí, señaló al empresario como un tipo de productor «que se fundió, salió devuelta y así varias veces. Una de las oportunidades que resurgió fue durante el kirchnerismo», agregó.
El concejal, sin embargo, apuntó a la situación económica nacional. «Nos estamos olvidando que este señor tuvo problemas en mayo donde cerró la distribuidora en Lanús y Berazategui. En ese momento no había tasa diferencial», explicó el concejal Daniel Dragoni.
Además, deslizó que el empresario dueño de Diarco no reconoció los años de trabajo de muchos de los trabajadores despedidos. «Había empleados con más de 20 años a los que solo le quería reconocer la mitad de antigüedad. Por eso tuvo que intervenir el sindicato y están todavía virtualmente tirados», comentó.
«Siempre vamos a tratar de ayudar al que menos tiene»
Sobre la situación impositiva, agregó: «Si uno tiene que preguntarse entre pedirle un esfuerzo al que más tiene o menos tiene, siempre vamos a tratar de ayudar al que menos tiene. Que nos vengan a decir que aumentaron los precios porque aumentamos un 3 por ciento la tasa, la verdad es que es poco creible».
Para concluir, el representante de Unión por la Patria remarcó que el objetivo de las críticas tiene un trasfondo «ideológico». También subrayó que, desde el concejo deliberante, seguirán «favoreciendo a los comercios de barrio» y no a «estafadores que no les reconocen años de trabajo a sus empleados».
